"Shigurui: Death Frenzy" de Norio Nanjo y Takayuki Yamaguchi

invitado: Sanzakimus

¡Hola gente! Para el 99,9% de los lectores de esta página soy un total desconocido, lo cual es lógico considerando que es la primera vez que escribo para esta página. Me presento, soy Sanzakimus y he llegado a esta página para escribir de cómics mayormente conocidos como mangas o cómics japoneses (¿Qué es un manga?). La pregunta lógica es ¿quién es este sujeto que nos viene a hablar de mangas? Les contaré brevemente de mí. En primer lugar, tranquilos, no soy un Naruto-lover (aunque me leí la serie completa) ni nada por el estilo. Leo varias series, es cierto, pero soy selectivo. No me considero un erudito del área, pero tampoco leo cualquier cosa que venga de oriente como pasa con mucha gente. Así como me gusta el manga, soy muy crítico con muchas series que simplemente no puedo soportar. Por lo tanto, creo que podré comentarles obras que están sobre el promedio y que les dejarán un buen sabor en su paladar.

Y bueno, creo que es suficiente. Vamos a lo que nos reúne por acá: ¡reseñar un comic manga! Dado que es mi primera reseña, voy a reservarme mi favorito para cuando haya pulido mi forma de escribir. Sin embargo, no por eso he traído una obra de menor calidad. Señoras y señores, hoy hablaremos de Shigurui. (¿Qué es eso? ¿Se come?).

Datos técnicos:

• Nombre: Shigurui (lit. “Death Frenzy”)
• Guión/Dibujo: Takayuki Yamaguchi
• Año de inicio: 2003
• Número de tomos: 15 (finalizada en 2010)
• Editado por IVREA España (editada hasta el volumen 8 a la fecha)

Shigurui es un manga crudo. En primer lugar, la crueldad de la historia. Basada en el primer capítulo de la novela Suruga-jo Gozen Jiai (El Torneo del Castillo Sunpu) de Norio Nanjo, el relato se centra en la historia dos guerreros obligados a luchar una batalla a muerte con espadas reales por orden del Daimio (soberado feudal) Tokugawa Tadanaka. Los participantes son Fujiki Gennosuke, un guerrero manco, e Irako Seigen, espadachín ciego. El combate a simple vista pareciera ser una farsa: un hombre manco no debería tener la fuerza suficiente para cortar con una espada, mientras un ciego no es capaz de ver a dónde atacar. Sin embargo, estos no son simples guerreros. Fujiki e Irako tienen un pasado en común que les motiva a dar todo en este combate destinado a la tragedia, el cual nos es relatado justo antes de empezar la batalla con un salto temporal a siete años atrás. Y aquí es donde empieza la verdadera historia: cómo la vida de dos hombres cambia radicalmente cuando se Irako llega a desafiar el dojo de Iwamoto Kogan, donde Fujiki es discípulo. La historia está llena de datos históricos que le dan mucho peso –el hecho que esté basada en una novela ayuda bastante-, además que el autor logra desarrollar a los personajes de manera muy interesante. No es una simple historia donde hay un bueno y un malo. Aquí nos adentramos en la vida de cada uno de los jóvenes guerreros, conocemos sus experiencias y sufrimientos, llegando a entender por qué actúan de esa forma. Es evidente ver que el odio es un agente importante en la historia, pero el saber las raíces más profundas de ese odio enriquece la historia de manera sublime.

El segundo aspecto de crudeza en este manga es su dibujo. Desde ya les digo: las escenas sangrientas y de sexo no son pocas.

Shigurui es claramente un seinen (manga para adultos) no recomendado para personas sensibles

Mientras en los primeros capítulos el dibujo de Yamaguchi es un poco dubitativo, va tomando fuerza a medida que avanza la historia. Sus dibujos no son los clásicos “monos chinos” con grandes ojos, orejas de gato o similares. No. Sus trazos tratan de ser más realistas, con un aire que recuerda a Takehiko Inoue (Slam Dunk, Vagabond) o Kentarou Miura (Japan, Berserk). Los dibujos de Yamaguchi recurren varias veces a exageraciones que no son más que una expresión más poética de lo que está sucediendo en la historia. Es realmente un agrado para los ojos leer un manga así. Y cada ciertos capítulos hay páginas coloreadas con gran talento.

Para ir finalizando, les cuento que existe una versión animada de Shigurui de 12 capítulos que abarcan los primeros 6 tomos. La música es genial, además de que la animación fue muy bien hecha. Sigo esperando la segunda temporada, aunque la serie fue hecha en 2007, por lo que es muy difícil que salga. Por otro lado, el primer capítulo de la novela en que se basa esta historia está disponible en la red (click aquí) para promocionar el libro completo. Una lectura bastante interesante que, junto al manga, no debería dejarse pasar.