"The X-Files: Season 10" de Joe Harris: I Still Want to Believe

Mucho se ha hablado éstas semanas del regreso de los agentes del FBI más famosos de la pantalla chica. The X-Files vuelve a la televisión; 13 años después de que vimos el final en el episodio "The Truth" y 8 de su última -y para algunos fallida- aparición cinematográfica. La gran expectación que esto ha causado y la avalancha de entrevistas, teasers y fotos filtradas de las grabaciones ha eclipsado el verdadero retorno de la serie a la primera fila de actualidad, que ocurrió con la publicación de una serie de cómics, The X-Files: Season 10, hace más de 2 años. Con la salida en el mes de Junio recién pasado del #25, llegamos al final de temporada y antes del inicio de la Season 11, agendado para este 12 de agosto, toca hacer un repaso de sus antecedentes y análisis de lo que estos episodios nos dejaron.
En Marzo de 2013 salió a la luz, como un bombazo: nuestra amada serie volvía a la vida, aunque en un formato no habitual para el común del público: los cómics. La editorial IDW Publishing y la productora FOX se unían para traer de vuelta a The X-Files en un anuncio en la Emerald City ComicCon. The X-Files: Season 10 fue una colección abierta y regular, que marcó el regreso a la historia de Mulder y Scully, tomando al testigo de la trama justo donde nos quedamos luego del fin de la novena temporada y el film The X-Files: I Want to Believe. El cómic fue escrito por Joe Harris, tuvo dibujos de Michael Walsh, colores de Jordie Bellaire y portadas del chileno Carlos Valenzuela, aunque, como es habitual en los cómics USA, en números posteriores el equipo artístico fue reemplazado. El anuncio oficial de prensa de IDW indicaba lo siguiente:
En el arco argumental de apertura, “Believers”, los lectores se encontrarán con Mulder y Scully viviendo juntos una vida normal, bajo identidades secretas. Sin embargo, la visita de un antiguo amigo amenaza con arrancarlos de su tranquilidad suburbana, mientras se enteran que alguien está persiguiendo a todos aquellos relacionados con los Expedientes X. Prepárate a enfrentar a viejos conocidos, algunos muy inesperados, y a nuevas y viejas amenazas, y a un intrigante misterio diseñado para el regreso de la querida franquicia a la gloria.
IDW Publishing
Si bien la noticia se difundió masivamente con rapidez, el entusiasmo inicial dió paso a algunas voces de quejas. Mientras muchos fans se preguntaban “¿qué es un cómic?”, otros despotricaban acerca de que un ícono de la televisión y una franquicia tan popular como ésta no podía volver en un formato tan denostado como el de las viñetas. Si bien algo de ese pesimismo era justificado porque la inmensa mayoría de los aficionados aún soñaba con una tercera película que borrase el mal sabor que dejó I Want to Believe, el panorama comenzó a aclararse a medida que supimos más información acerca de este regreso. La primera señal positiva fue que Chris Carter, creador de The X-Files, actuaría como productor ejecutivo, lo que aseguraría que de una u otra manera continuaría manejando los hilos de sus creaciones predilectas, y mantendría los hechos en la línea que, para bien o para mal, tenia planeado.
Además de lo anterior, fuimos conociendo entrevistas y artículos acerca de Joe Harris, en los que nos quedó claro que el escritor estadounidense era un verdadero conocedor de la serie, y que, efectivamente, trabajaba codo a codo con Carter. “Cuando IDW me preguntó si estaba interesado en escribir la serie”, recuerda Harris, “supe dos cosas. Primero, que la respuesta sería '¡Fuck, sí!' y segundo, que creía tener una buena idea de cómo traerla de vuelta. El editor estuvo de acuerdo, afortunadamente, y Twentieth Century Fox nos informó que estaban muy entusiasmados por la dirección propuesta. Pero fue cuando Chris nos dio su bendición que todo se volvió real para mí.”
Harris tendría la difícil misión de plasmar el mundo de Scully y Mulder y satisfacer a legiones de fans ávidos de saber los destinos de los personajes, mientras reposiciona la serie a la altura que fue perdiendo en las últimas temporadas, y sobre todo en la segunda película. Supimos que el escritor contaba con bastante libertad, aunque no total, pues como nunca hubo un descarte real de la tercera película, Carter quería guardar para sí algunos de los argumentos más jugosos, como lo sucedido con William, el hijo de Mulder y Scully dado en adopción, o la supuesta invasión que tenía como fecha el año 2012. El reto era alto, las expectativas aún más, y, en definitiva, Harris tenía millones de ojos encima (y eso solo contando los humanos, nada sabemos de los extraterrestres) y la posibilidad de saltar a primera línea.
¿Y lo consiguió? En mi humilde opinión, sí. La crítica de los fans y sitios especializados, tanto en cómics como en The X-Files, parecen coincidir en que Harris apunta en el centro cuando se trata de reflejar las personalidades de Mulder y Scully. Sus personajes son en todo momento creíbles, los misterios están bien establecidos y el status quo, desde el momento en que dejamos a los protagonistas hasta el fin de esta Season 10, fluye de manera bastante lógica. Desde un primer momento el guionista habló de un plan de alrededor de 2 años de historias, y sin duda ocupó bien los espacios acotados de las 24 páginas mensuales del cómic construyendo una mitología sólida, tanto la nueva como aquella heredada de los elementos más icónicos de la versión catódica, recontextualizados en el panorama actual de paranoia, información instantánea y globalización, al igual que establecer claramente al archienemigo correspondiente.
Fue una gran aventura, con una inusual coherencia respecto a la compleja trama de la serie, con guiones en un estilo puramente X-Files en que se conjugan a la perfección las respuestas con, por supuesto, más preguntas. Tal vez peca de un excesivo “fan service”, con el retorno sorpresa (o no tanto) de varios personajes, pero todo está respaldado por ideas frescas y bien ejecutadas. El tándem escritor-dibujante-colorista nos entrega un material delicioso, aunque como es natural para la continuación de una serie con dos películas y más de 200 episodios a cuestas, es más fácil de digerir para fans antiguos que para aquellos que se dejan seducir por el mundo X por primera vez. Al final de esta Season 10, el mundo de Mulder y Scully vuelve a tomar un giro de 360 grados, y tenemos en el aire más preguntas que certezas, pero ¿no es acaso eso el ADN de los Expedientes X? Aún, y como siempre, la verdad sigue ahí afuera...
La temporada 10 consistió de 25 números, de los cuales el último tiene extensión doble, además de dos Annuals independientes de la trama principal -que como no tienen relación, no serán reseñados-. Hay episodios de varios capítulos, así como unitarios, que mezclan la trama tipo mitológica con aquella de tipo “monstruo del mes”. Los arcos argumentales van de la siguiente manera:
Believers (Creyentes)
The X-Files: Season 10 #001-005
Guion: Joe Harris
Arte: Michael Walsh
Color: Jordie Bellaire
Portadas: Carlos Valenzuela
Es el comienzo de la aventura. En las primeras páginas vemos a la Dra. Blake, identidad falsa de Dana Scully, siendo perseguida por un misterioso grupo de encapuchados de los cuales no logra escapar. En último momento es rescatada y raptada por otro misterioso encapuchado, de naturaleza similar a sus perseguidores, que es identificado como Deacon (Diácono), mientras que el grupo de encapotados se denominan los Acolytes. Mediante un flashback nos enteramos de cómo la vida sencilla que lleva con Fox Mulder, bajo el programa de protección de testigos de la Agencia y similar a la situación de I Want To Believe, queda hecha trizas por la visita del ahora Sub-Director Walter Skinner, quien les advierte que alguien ha hackeado la base de datos del FBI para conseguir datos de los agentes relacionados con los Expedientes X, lo que rápidamente genera la sospecha en Scully de que el verdadero objetivo de la búsqueda es el paradero de William. Skinner también es atacado y Mulder debe usar el último recurso confiable que posee: recurrir a los Lone Gunmen, que no estaban muertos pero tampoco de parranda, y que también viven, o más bien se ocultan, bajo la protección de FBI.
Paralelamente, tenemos la presencia de John Dogget, que investiga una amenaza terrorista a un oleoducto que no por coincidencia transporta magnetita (sí, ese compuesto que destruye a los híbridos humano-alienígenas), y de Mónica Reyes, que es enviada para asegurar el bienestar de la familia adoptiva de William, pero descubre que éstos han sido asesinados por los Acolytes y William está desaparecido. A partir de acá, ambos agentes quedan Desaparecidos en Acción.
De vuelta a la trama principal, los hechos confluyen rápidamente. Tenemos el regreso del infame Cigarette Smoking Man, o más bien algo que se le parece, pues al final del arco, cuando vemos que debe rendirle cuentas a un hombre de traje que parece ser del Syndicate, su cuerpo es una especie de masa inestable e incoherente que repite líneas dichas por el personaje en pasados y recordados capítulos de la serie (2x08 "One Breath" o 6x11 "Two Fathers"). El Deacon lleva a Scully al Parque Nacional Yellowstone, al cual también llega Mulder siguiendo la pista del misterioso oleoducto con magnetita, que tiene la forma de una barrera, aunque no está claro si es para proteger algo o para evitar que algo escape.
Claramente, todos los movimientos del Deacon y los Acolytes están relacionados con William, pues en el críptico lenguaje típico de la serie no deja de hacer referencia a él (“tenemos a La Portadora”, “la cuna está vacía”). Finalmente, Mulder rescata a Scully; una misteriosa nave espacial sale desde el suelo al estilo The X-Files: Fight the Future y, como siempre, la motivación de el/los villanos no queda claramente establecida, excepto que, por la forma en que son destruidos, parecen colaborar con los Colonists (5x14 "The Red and the Black"). Con la prueba tangible que Mulder, Scully y los demás implicados en la unidad de los Expedientes X están en peligro, los agentes son relocalizados en el FBI para que puedan utilizar los recursos que eso implica para investigar y neutralizar la amenaza.
De este arco surgen dos preguntas que serán importantes para el desarrollo de la temporada: 1) ¿qué son el Deacon y los Acolytes? Claramente son de la misma naturaleza, pues son metamorfos con poderes psíquicos y telequinéticos, y naturaleza alienígena o al menos híbrida, pues son destruidos por la magnetita. 2) ¿Quién es el hombre que trajo de vuelta a Smoking Man? Todo parece indicar que es el nuevo conspirador en la sombra, y al igual que sus pasados colegas del Syndicate, toma un nombre misterioso: Glasses-Wearing Man.
Hosts (Huéspedes)
The X-Files: Season 10 #006-007
Guion: Joe Harris
Arte: Elena Casagrande, Silvia Califano
Color: Arianna Florean
Portadas: Carlos Valenzuela
Con Mulder y Scully ya instalados de vuelta en el FBI, los agentes deben hacer frente a su primer caso “normal”. Se presenta un nuevo personaje, la Asistente del Director Anna Morales, y tenemos de vuelta al monstruo favorito de todos: ¡Flukeman! El desarrollo de la investigación nos retrotrae a la familiaridad, con Mulder haciendo la investigación de campo mientras Scully, desde morgues y laboratorios patológicos, trata de explicar la desaparición de varios turistas y el hallazgo de un cuerpo con mordidas similares a las perpetradas por el gusano mutante ruso del episodio 2x02: "The Host". Como dato curioso, acá se demuestra aún más lo obsesivo que es Harris con los detalles, pues la acción se desarrolla en Martha's Vineyard, donde según el periódico sensacionalista visto en el episodio 3x17 "Pusher" habían avistamientos del tipo Flukie. Es un arco argumental entretenido, en que nos queda claro que Mulder no ha perdido su gusto por nadar en aguas servidas y pasear por cloacas, pero que sirve sobretodo para asentar el lado domestico del regreso de ambos al FBI. Especialmente emotivo es el momento en que ocupan su antigua oficina y Mulder despliega su famoso póster, que ésta vez reza “I Still Want to Believe”.
Being for the Benefit of Mr. X (En Beneficio de Mr. X)
The X-Files: Season 10 #008
Guion: Joe Harris
Arte: Michael Walsh
Color: Jordie Bellaire
Portadas: Carlos Valenzuela

Si no hemos tenido suficientes regresos con los de los números anteriores, acá tenemos uno más, el hombre conocido sólo como Mister X. El moreno informante de Mulder que pasó a mejor vida en el episodio 4x01 "Herrenvolk" vuelve para darnos otra dosis de nostalgia y complicar un poco más la mitología planteada por Harris. El episodio comienza con un flashback a 1987, donde conocemos más datos del Proyecto Purity (1x24 "The Erlenmeyer Flask") , de sus primeros fracasos (similar a lo visto en 2x10 "Red Museum") y de los desencuentros de X y Deep Throat (antiguo aliado de Mulder) con el Syndicate, que los llevaron a convertirse en sus informantes. De vuelta al presente, y mientras Mulder retoma como pasatiempo enterrar lápices en el techo, los agentes reciben una llamada que los lleva de vuelta al antiguo departamento de Fox, donde alguien dejó un frasco con lo que aparenta ser sangre y una marca de “X” con cinta adhesiva en la ventana, la señal inequívoca de contacto y carta de presentación de Mister X. Finalmente, mientras Scully descubre que el frasco contiene el compuesto del Proyecto Purity, Mulder se reúne con el supuesto Mister X, sólo para ver cómo éste actúa de forma errática y se disuelve en una masa verde de manera similar al Smoking Man que vimos al final de “Believers” (#005) y al de los demás híbridos humano-extraterrestres de sangre tóxica. A estas alturas ya podemos concluir que ni X ni el Smoking Man están de regreso, sino que alguien, posiblemente el Glasses-Wearing Man, ha reanimado su forma y memoria a partir de algún tipo de híbrido. ¿Actuaba realmente X por su propia voluntad o todo es un plan del malo de turno? Ya veremos.
Chitter (Chirriador)
The X-Files: Season 10 #009
Guion: Joe Harris
Arte: Greg Scott
Color: Art Lyon
Portadas: Carlos Valenzuela

Otro episodio autoconclusivo. Como los números anteriores fueron mitológicos o secuelas de cosas ya vistas en la serie, podemos considerar que éste es el primer episodio del "monstruo de la semana" 100% original de Harris. El episodio comienza con Morales, Mulder y Scully formando parte de un grupo de asalto que rodea la casa de un sospechoso de rapto, que alega seguir las órdenes de una entidad llamada The Chittering God. Con una adecuada dosis de horror y misterio, el episodio logra sus cotas más altas al enfrentar a Scully con los mayores dolores de su vida, la pérdida de sus hijos Emily (5x06 "Christmas Carol" y 5x07 "Emily") y William (9x16 "William"), reforzando la idea de la importancia de éste último en la trama actual de la serie y el futuro de los protagonistas. Punto negativo: en la portada se ven cucarachas, lo que a muchos nos hizo soñar con el regreso de la Dra. Bambi Berenbaum (3x12 "War of the Coprophagues"), lo que finalmente no ocurrió. Aún lloro por eso.
More Musings of a Cigarette Smoking Man (Más Reflexiones de un Fumador)
The X-Files: Season 10 #010
Guion: Joe Harris
Arte: Menton3, Tony Moy
Color: Art Lyon
Portadas: Carlos Valenzuela

Como su nombre lo indica, el episodio sigue la línea de uno de los más aclamados capítulos de la serie, 4x07 "Musings of a Cigarette Smoking Man". Y este número definitivamente está hecho para los fans más duros, ya que sus constantes referencias a personajes del pasado lo hacen un bocado difícil de tragar para el lector casual. De todas maneras, la narración y las ilustraciones de sus páginas son exquisitas y para mí es una obra de arte. Harris nos muestra más de la amistad que unía a Spender, nombre real del Smoking Man, con Bill Mulder, el padre de Fox. Amistad entre comillas, pues también nos enteramos del momento en que la madre de Fox da por terminada su relación de infidelidad que ha llevado por años con el Fumador. En un momento dado aparece Fox, de aproximadamente 5 años, y como sabemos que el Smoking Man es su padre se puede asumir que su relación duró al menos 6 años, nada mal.
Aun más, podemos dudar acerca de quién es el verdadero padre de Samantha Mulder, quien nació el mismo año en que se desarrollan esas viñetas del cómic. Además, vemos los primeros fracasos del Fumador en tratar de publicar su novela Take a Chance y su relación con Cassandra Spender mientras ésta estaba embarazada de Jeffrey Spender, e incluso tenemos una referencia a los híbridos del Dr. Klemper, del que ya supimos en 2x25 "Anasazi" y 3x02 "Paper Clip". De vuelta al presente vemos al “resucitado” Smoking Man que trata de mantener su propia agenda y dignidad, pero se ve absolutamente dominado por el Glasses-Wearing Man. En resumen, un interesantísimo viaje al pasado que ayudado por un arte sobresaliente convierten a este episodio en uno de los mejores de la Season 10, y reafirma al Smoking Man como el villano #1 de los que se han robado nuestro corazón. Snif.
Pilgrims (Peregrinos)
The X-Files: Season 10 #011-015
Guion: Joe Harris
Arte: Matthew Dow Smith
Color: Jordie Bellaire
Portadas: Francesco Francavilla
Acá nos encontramos con un nuevo arco mitológico en el que, por supuesto, tenemos regresos por montón. Y nada menos que el del triple agente ruso bastardo Alex Krycek. Y con él, otro de los elementos icónicos de la serie: Black Oil, el aceite negro. Es una trama enrevesada, difícil de seguir por momentos y que definitivamente complejiza aun más la mitología de ésta temporada. Muchas preguntas, pocas respuestas, viajes en el tiempo y una que otra incoherencia en otro episodio con sabor a clásico. Veamos qué hay.
Mulder y Scully deben viajar a Arabia Saudita para investigar un ataque a un nuevo yacimiento petrolífero donde se ha descubierto algo más que crudo, el aceite negro. Krycek hace su aparición, infiltrado en el grupo de ataque, y hace volar la excavación. En el transcurso de la investigación, Mulder se topa con él, pero Alex manifiesta no recordar casi nada y estar ahí casi en contra de su voluntad, aunque antes de explicar nada es raptado por “algo” de luz potentísima, similar a la nave vista en Yellowstone (#005). Mientras, Scully se enfrenta al clásico secretismo de las autoridades locales pero logra interrogar a un testigo del ataque terrorista que confirma que el objetivo no era el yacimiento, si no el aceite negro que ahí se descubrió, y que la entidad está tratando de huir del país. Posteriormente, Scully también es raptada, aparentemente de igual manera que Krycek, y ambos aparecen casi al instante en Arlington, en la base de los Lone Gunmen. Las pruebas hechas a Krycek son concluyentes en confirmar que es él, y no un constructo de los manejados por el Glasses-Wearing Man, pero por alguna razón no recuerda nada posterior a cuando lo vimos por última vez atrapado en el silo de misiles en 3x14 "Apocrypha" (aunque, tal vez debido a un error de Harris, recuerda vagamente conocer el departamento de Skinner, que ocurrió posteriormente al episodio antes mencionado).
Aún en Arabia, Mulder entra en contacto y es infectado por el aceite negro, que se autodenomina como Sheltem, mientras se entera que Krycek es manipulado por los Alien Rebels anticolonización y que fue enviado a cazar a los Foresaken Ones (Los Olvidados), los primeros colonizadores extraterrestres de la Tierra, a los cuales pertenece Sheltem. El objetivo de este aceite negro es llegar a Skyland Mountain, conocido lugar de raptos extraterrestres (2x06 "Ascension", 5x13 "Patient X"), con la idea aparente de volver a casa, aunque luego de liberar el cuero de Mulder, es atacado y eliminado por un grupo de Rebeldes sin rostro. Paralelamente, Krycek es capturado por el Smoking Man bajo las órdenes del Glasses-Wearing Man, y en su interrogatorio nos enteramos que este Alex es el del pasado y que cada vez que falla en su rol de cazador, es “traído nuevamente desde el pasado para seguir con su misión por los rebeldes”. No queda claro si es porque los rebeldes lo reconstruyen a partir de los recuerdos y personalidad que el aceite negro recolectó cuando estuvo en su cuerpo en los episodios 3x13 "Piper Maru" y 3x14 "Apocrypha" (una frase dicha por Krycek al Smoking Man sugiere que algo tienen en común en su nueva biología) o porque los aliens son capaces de viajar en el tiempo (Krycek en todo momento dice que lo último que recuerda es el silo y unas luces, que pudiesen ser un ovni).
Nos enteramos que el Glasses-Wearing Man gusta del ajedrez (pista), que lee mentes y tiene otros poderes de naturaleza alien (pista también) y que ha “resucitado” a todos los antiguos conspiradores, como al Well-Manicured Man, lo que de acá en más denominaremos Neo-Syndicate. Ya sabemos que éstos sujetos son clones, puesto que el fumador es destruido, pero otro toma inmediatamente su lugar. No se sabe si el nuevo villano ha tomado parte por el bando colonizador o rebelde, más bien parece que se limita a obtener información mediante el interrogatorio de Krycek , manteniéndose al margen. Por último, se revela que la A.D. Morales rinde cuentas al Smoking Man, sumándose así a la lista de personajes no confiables.
En resumen, una buena historia que demuestra perfectamente lo inmerso que está Harris en la mitología de la serie, y que eleva la cuota de calidad de esta Season 10.
Inmaculate (Inmaculada)
The X-Files: Season 10 #016-017
Guion: Joe Harris
Arte: Colin Lorimer
Color: Joana Lafuente
Portadas: Francesco Francavilla
Y sí, ya lo adivinaron, acá hay más regresos. Aunque esta vez es de un personaje un tanto foráneo, que por arte y magia de eso que llaman universo compartido, participó en la serie en un episodio de la séptima temporada, y ahora lo tenemos acá. Se trata de Frank Black, ex-agente y analista del FBI y protagonista de la otra joya de Chris Carter, Millennium. Este arco en dos capítulos, del tipo "monstruo semanal", posiciona a Scully y Mulder en la investigación de un ataque terrorista contra una clínica abortiva que contiene trazas de ángeles, posesiones demoníacas, grupos suicidas y esas dicotomías religiosas que siempre causan problemas a nuestros agentes. Frank Black regresa, 13 años después de que lo viésemos por ultima vez en el episodio de The X-Files 7x04 "Millennium", y aunque su participación es mínima, al menos sirve de punta de lanza para su propia miniserie, también editada por IDW Publishing y escrita por Joe Harris. Quizá ahí sepamos más de qué ha pasado con el personaje y su hija Jordan Black, pues acá es poco lo que nos enteramos de eso, a excepción de que ya no tiene nada que ver con el Millennium Group.
Welcome back, Frank Black...
Monica & John
The X-Files: Season 10 #018
Guion: Joe Harris
Arte: Matthew Dow Smith
Color: Jordie Bellaire
Portadas: Francesco Francavilla

¿Recuerdan que Dogget y Reyes desaparecieron en el transcurso del primer arco, "Believers"? Si lo olvidaron, no hay problema, pues al FBI también se les olvidó y recién ahora sabremos qué fue de su suerte. Dogget resultó herido en la explosión que hubo en el oleoducto de magnetita que investigaba y fue raptado por un Acolyte, mientras que Mónica fue atacada por los Acolytes que suplantaron a los padres adoptivos de William. Ambos llevan retenidos un año y medio, el tiempo real que ha pasado desde que los vimos por ultima vez, y son custodiados por un Acolyte que manifiesta estar esperando “la señal” de su superior. Después de todo este tiempo, al parecer la instrucción que recibió fue liberar a los prisioneros y morir, y aunque John es de la idea de arrestarlo e interrogarlo, Mónica lo asesina usando un estilete dejado ahí adrede por su captor. Basicamente, eso es todo lo que ocurre, pues las 22 paginas del número se hacen cortas, como casi siempre. Esperamos saber más de Dogget y Reyes en el futuro.
G-23
The X-Files: Season 10 #019-020
Guion: Joe Harris
Arte: Tom Mandrake
Color: Sian Mandrake
Portadas: Francesco Francavilla
Y ahora, después de 18 números de tensión y dramatismo, Harris se lo toma con más relajo e intenta hacer un arco del tipo humorístico, que tan buenos réditos le trajo a la serie en sus tiempos mozos, como 4x20 "Small Potatoes" o 5x12 "Bad Blood". Mulder y Richard Langly investigan un proyecto secreto gubernamental que involucra narcóticos y drogas fumables, pero como se podría suponer, acaban expuestos a la sustancia y sufriendo locas alucinaciones, un viaje ácido con todas sus letras. El episodio es liviano y no merece mayor análisis, y personalmente considero que no termina de cuajar, aunque tal vez se deba al dibujo de Tom Mandrake, que nunca ha sido santo de mi devoción.
Elders (Ancianos)
The X-Files: Season 10 #021-025
Guion: Joe Harris
Arte: Matthew Dow Smith
Color: Jordie Bellaire
Portadas: Francesco Francavilla
Y así, después de 20 números, llegamos al arco Season Finale, que junto a poner un punto y aparte en la historia, sentará las bases de la Season 11.
Caroline Ross, una mujer que asegura ser abducida por extraterrestres, atenta contra la vida de Mulder por darle la espalda cuando su estabilidad mental fue cuestionada en el transcurso de una investigación clínica realizada años atrás. Sin embargo, ella se suicidó en 1991, lo que deja un manto de dudas acerca quién o qué es realmente Caroline. Esto dejó al descubierto evidencia y antiguas denuncias contra Mulder por malversación de recursos del FBI en investigaciones de dudosa utilidad para el Bureau, y además aparece una falsa acusación contra el agente por robo de información clasificada, lo que lo enfrentaría a cargos de traición. Esta información se filtra rápidamente entre el público y la prensa, transformándose en un circo mediático.
Tratando de escapar del acoso de la prensa, Mulder es raptado por hombres de negro que lo llevan a Guantánamo, Cuba, base de operaciones del Glasses-Wearing Man que se revela como Gibson Praise, el niño prodigio del ajedrez mitad humano mitad alien que los agentes conocieron en el transcurso de la quinta temporada y que sirvió de conejillo de indias para el Syndicate por un buen tiempo. Mulder descubre las cámaras de hibridación de los clones del sindicato, los cuales Gibson utiliza para obtener sus secretos, conocimiento y experiencia. Praise manifiesta estar detrás de las acciones de Caroline Ross, pero es para ayudar a Mulder y Scully, a quienes considera sus amigos, ya que arruinar la carrera de Mulder y sacarlo de la atención de sus enemigos es la única manera de asegurar la seguridad de los agentes y que puedan seguir su cruzada por la verdad. Mientras tanto, Scully obtiene ayuda de uno de los clones del Smoking Man para obtener la localización de Mulder e intentar rescatarlo, pero ignora que Mulder ya ha escapado, aunque Gibson está al tanto de ello y parece contar con eso para sus planes.
Ya en Cuba, Scully descubre que la gente de varios poblados alrededor de Guantánamo ha sido secuestrados y usados como sujetos de experimentación, lo que los ha dejado con horribles secuelas. Gibson intercepta a Scully y también la lleva a la base donde trata de explicarle sus planes, y se muestra apenado de que Mulder no comprenda que sólo quiere lo mejor para él. Scully se horroriza al ver que aquel niño que ella defendió del Gobierno en las sombras ahora se encuentra totalmente corrupto por el poder cada vez mayor que posee, debido al desarrollo de sus genes alienígenas. Si bien Gibson no revela abiertamente sus planes, estos tratan acerca de dominación, pues entra en juego Cantus, una compañía regida por Gibson que actúa como Contratista del Departamento de Estado, Ministerio de Justicia, Marina y Ejército de los Estados Unidos, e incluso del FBI, que ha tomado la decisión de exteriorizar la división de los X-Files dejando a Cantus a cargo. Así, Gibson se ha infiltrado en todos los poderes del estado norteamericano, llegando mucho más allá de lo que logró el sindicato original, aunque sigue sosteniendo que todo es con el objetivo de proteger a Mulder y Scully.
Determinada a detener la operación de Gibson, y asumiendo que la carga emocional de esta acción la marcará el resto de la vida, Scully decide acabar con él disparándole en la cabeza, solo para descubrir que el muchacho ha usado su tecnología de clonación en él mismo, ya que el cuerpo se disuelve en una masa verde, igual a lo ocurrido a los otros híbridos ya vistos en episodios anteriores. Un clon del Smoking Man usa el mecanismo de autodestrucción del laboratorio de Gibson en Guantánamo, mientras los miembros del Neo-Syndicate se suicidan como acto de rebeldía final contra el ahora villano.
La base secreta de los Lone Gunmen en Arlington es arrasada por Cantus, obligando a nuestros hackers favoritos a evacuar y huir. Skinner, que en números previos fue raptado por el Neo-Syndicate y puesto sobre aviso de los planes de Gibson, confronta a la A.D. Morales con el objetivo de exponer a Cantus, pero ésta le explica que el Departamento de Justicia ya tomó la decisión de exteriorizar la sección de Expedientes X, y que desde puestos más altos le han enviado un presente: un reloj de oro, que a nivel del FBI significa el “trofeo” a los agentes que han llegado a la jubilación. Alguien le envía una señal a Skinner de que se acoja a retiro por las buenas, antes que lo eliminen por las malas. Finalmente, Mulder es impulsado por Scully a darse a la fuga en una balsa, mientras ella le promete que usará todos sus recursos para demostrar su inocencia de los cargos de traición, aunque de improviso se ve rodeada de clones de Gibson que hacen que su consciencia y memoria se vayan a negro...
Y así, termina esta gran aventura llamada Season 10 de The X-Files. Harris sale airoso del desafío de insuflar nuevos aires a la historia de Mulder y Scully, recuperando viejos elementos e introduciendo otros nuevos y allanando el camino para el regreso de X-Files a la televisión. Chris Carter juró desde un principio que lo contado en estos comics sería canónico, pero ¿cómo incluirá estos elementos en los nuevos episodios de TV? ¿se atreverá a dar por conocidos estos hechos cuando la mayoría de los televidentes jamás leerán estos números? Las respuestas llegarán en enero de 2016, pero por mientras podremos contentarnos con que en un par de días Harris, Smith y Bellaire vuelven a la carga con la publicación del The X-Files: Season 11 #001. Esperemos que sea un viaje tan agradable como el que ya vivimos.