La historieta chilena y Marco Rauch: «Estamos buscando nuestro norte para seguir creciendo»
Onceavo día camino al #DiaDeLaHistorietaCL y hoy conversamos con Marco Rauch, director y editor de Mythica Editorial, encargados de la saga de historias apocalípticas Zombies en la Moneda. Ha participado en una variedad de proyectos, dentro de los que está Celeste Buenaventura y Crónicas de Mythica entre otros. Además, en agosto de este año organizó su primer evento, Recoleta Mythica, con la ayuda de la Municipalidad de Recoleta.
Marco nos cuenta el descubrimiento de su afición por la historieta nacional, las publicaciones de la editorial estatal Quimantú y la jovial etapa actual en la que se encuentra el cómic y la novela chilena.
¿Qué te ha entregado a tu vida personal y profesional la historieta chilena, como lector, autor y editor?
Como lector, la historieta fue una herramienta muy importante en mi formación. Puede parecer una división molesta, pero soy un convencido de que todos aquellos que crecimos leyendo historieta, y en particular quienes alimentamos nuestra curiosidad y sed de conocimientos a través del Mampato original, por ejemplo, tenemos una forma distinta de enfrentar al mundo y relacionarnos con nuestros semejantes. Tuve la suerte de conocer los productos de Quimantú y a través de mi padre recibir mucha historieta argentina (de los años maravillosos de la Columba) y europea.
Ahora como autor/editor, me siento armado de un potente acervo cultural para desarrollarme y crecer haciendo lo que amo. Conozco las potencialidades de la historieta en el aula y en la difusión de cultura en general, así como también las características necesarias para que esta entrega de conocimiento se pueda hacer en forma amena y atractiva para cualquier lector. Y por supuesto, no pierdo de vista la motivación basal de cualquier buena historieta: expresar el particular punto de vista de sus autores, sus motivaciones y todo aquello que los mueve a crear, pero siempre de una forma entretenida, que capture al lector y que sea lo más sencilla posible de entender por cualquier persona.
Creo que por ahí anda la clave de lo que distingue a una buena historieta. En realidad, no concibo a quienes dicen que no leen o no han leído historietas y pretenden dedicarse a trabajar en este mundo tan atractivo.
¡Por supuesto que hay que leerlas, mucho, lo más posible y en la variedad más extensa que se pueda abarcar!
¿Qué autor o autora de la tradición de la historieta chilena crees que representa mejor el cómic nacional, y por qué?
Creo que ya se adivina mi respuesta, a partir de la anterior. Sin duda alguna, Themo Lobos es prácticamente el alma mater de la enorme mayoría de los chilenos que amamos nuestra historieta. Pero si bien Themo es quien mejor conecta con el lector, a nivel creativo no puedo dejar de mencionar a Coré y Mario Igor, quienes para mí, son los puntos más altos que hemos tenido en ilustración e historieta chilena.
¿Como ves y sientes hoy la historieta chilena actual y qué autores o autoras te parecen más interesantes? ¿Por qué?
Ya dejamos atrás ese frenesí que provocó el redescubrimiento de la historieta en los medios masivos. Hoy estamos como en una especie de adolescencia, buscando nuestro norte para seguir creciendo. Hay diversas ramas en este proceso, como en cualquier árbol evolutivo que se precie. Cada quien tomará el camino que más le acomode y debemos saber que más de alguno será un camino ciego, así es que no hay que amilanarse. Hay que recoger lo pedazos, desandar el camino y volver a intentarlo tomando otra ruta. Afortunadamente, aquellos emprendedores que sigan llegando, tendrán la experiencia, éxitos y fracasos de todos nosotros los que empezamos antes, para que su camino sea (ojalá) más seguro y próspero.
Sobre autores, en un medio tan pequeño como el nuestro resulta ingrato y hasta molesto individualizar y sin embargo, me atrevo a destacar dos nombres:
Félix Vega, que sin dudas no es para nada un novato sino todo lo contrario, pero que recién ahora tiene la posibilidad de ser conocido o redescubierto en su país de origen, tras una maravillosa carrera de años en el extranjero. Félix tiene a su haber el raro privilegio de ser a la vez un referente y un descubrimiento para muchos.
Y Rodrigo López, un autor integral al que vengo siguiendo y apoyando desde hace años, quien ahora está siendo reconocido incluso en mercados tan difíciles y esquivos como el argentino. Nadie es profeta en su tierra, dice el conocido refrán. Creo que Félix y Rodrigo pueden llegar a ser poderosos desmentidos para esa sentencia.
Puedes conocer más de Marco Rauch en su cuenta de Twitter @marcorauchb o en la cuenta de la editorial @mythicaedit, además de su fanpage de Facebook.